¿Se puede quitar un aval de un préstamo personal? Dejar de ser avalista
Ser avalista de un préstamo personal supone un compromiso importante, ya que implica responder con tu patrimonio en caso de que el titular del préstamo no cumpla con sus obligaciones de pago.
Si te encuentras en esta situación y no sabes como dejar de ser avalista o si se puede quitar un aval de un préstamo personal; es posible hacerlo, pero debes seguir paso por paso nuestros consejos.
Qué es un aval y cómo funciona
Un aval es una garantía personal que se ofrece a una entidad financiera para asegurar el cumplimiento del pago de un préstamo.
En otras palabras, el avalista se compromete a hacerse cargo de la deuda en caso de que el titular del préstamo con aval no pueda cumplir con sus obligaciones de pago. Esta figura es común en los préstamos personales y en las hipotecas, y suele ser un requisito para aquellos prestatarios que no tienen un historial crediticio sólido o que presentan un riesgo elevado para el banco.
El funcionamiento del aval es relativamente sencillo:
- El avalista firma un contrato en el que se compromete a responder por el préstamo en caso de impago.
- Si el titular del préstamo deja de pagar, el banco tiene derecho a exigir el pago al avalista.
- Este compromiso es legalmente vinculante y puede tener consecuencias serias para el avalista, incluyendo la afectación de su historial crediticio y la posibilidad de enfrentarse a acciones legales.
Qué tipos de aval existen
Una vez visto qué es un aval, en el contexto de los préstamos personales y las hipotecas, podemos diferenciar tres tipos de avales.
Aval simple
El aval personal es el más frecuente y consiste en que una persona física garantiza el pago del préstamo con su patrimonio personal. Se reclamará primero al avalado, y si este no cumple, se dirigirá al avalista.
Aval solidario
En el aval solidario, si el avalado no cumple con la deuda, la entidad reclamará al avalista solidario la totalidad del pago de la deuda.
Aval bancario
En este caso, una entidad financiera se compromete a pagar la deuda en caso de que el prestatario no lo haga. Este tipo de aval suele ser más costoso debido a las comisiones que cobran los bancos por ofrecer esta garantía.
Ten en cuenta que si no puedes conseguir un aval, también tienes la opción de solicitar un préstamo sin aval.
¿Puedes dejar de ser avalista de un préstamo personal?
Sí, es posible dejar de ser avalista de un préstamo personal, pero el proceso dependerá de las condiciones específicas del contrato de aval y de la voluntad del banco.
Si quieres dejar de ser avalista para conseguir otro tipo de financiación, te interesará saber que siendo avalista puedes pedir un préstamo o hipoteca.
Cómo dejar de ser aval de un préstamo
Para que sepas cómo dejar de ser avalista de un préstamo personal, vamos a ver las dos principales vías que puedes seguir:
- Con el consentimiento del banco:
- Negociación: El avalista puede negociar con el banco la cancelación del aval. El banco puede aceptar la cancelación si considera que el prestatario tiene suficiente solvencia para pagar el préstamo por sí mismo.
- Novación: El prestatario puede solicitar una novación del préstamo, que consiste en la modificación de las condiciones del mismo. En la novación, se puede incluir la cancelación del aval.
- Subrogación: El prestatario puede solicitar una subrogación del préstamo, que consiste en el cambio de entidad financiera. En la subrogación, se puede incluir la cancelación del aval.
- Sin el consentimiento del banco:
- Demanda judicial: El avalista puede demandar al banco para solicitar la nulidad del aval. Esta opción solo es viable en determinados casos, como por ejemplo si el avalista no fue informado adecuadamente de las condiciones del aval o si el aval se prestó bajo presión.
Ejemplo de cuando se puede cancelar un aval:
Imaginemos que María avaló un préstamo por el coche de su amigo Alberto hace dos años. En ese momento, Alberto tenía una situación financiera estable, pero recientemente ha perdido su trabajo y le está costando pagar las cuotas del préstamo. María está preocupada porque teme que Alberto no pueda pagar el préstamo y que el banco le reclame la deuda.
En este caso, María puede intentar negociar con el banco la cancelación del aval. Si el banco no acepta, Alberto podría plantearse solicitar una novación o una subrogación del préstamo para incluir la cancelación del aval. En última instancia, Juan podría incluso demandar al banco para solicitar la nulidad del aval.
Es importante tener en cuenta que:
- Dejar de ser avalista de un préstamo puede dañar la relación con la persona que avaló. Surgen muchas tensiones al no saber a quién embargan primero, si al deudor o al aval.
- Si el avalista deja de serlo y el prestatario no paga el préstamo, el banco puede incluirlo en ficheros de morosos.
- Es recomendable consultar con un abogado si se puede anular un aval, para conocer las opciones legales disponibles para dejar de ser avalista de un préstamo.
- Y si aún no has conseguido tu hipoteca teniendo aval, puedes seguir estos trucos para que te concedan la hipoteca.
Cómo dejar de ser avalista de una hipoteca
El proceso para dejar de ser avalista de una hipoteca es similar al del préstamo personal, pero suele ser más complejo.
De forma obligatoria, se requiere el consentimiento del banco y del titular de la hipoteca.
A través de estos métodos podrás aprender a como dejar de ser avalista en una hipoteca:
- Cancelación parcial del préstamo: Si el titular de la hipoteca reduce el importe del préstamo, el avalista puede quedar liberado de una parte de su responsabilidad.
- Venta de la vivienda: Si la vivienda se vende por un importe suficiente para cubrir el préstamo, el avalista queda liberado de su responsabilidad.
Cómo ves, se puede anular un aval, pero no es un proceso sencillo. Tendrás que estudiar bien tus pasos y los motivos de tu anulación antes de comenzar una disputa con la entidad financiera.
